El verdadero sentido de la existencia

El amor del Padre es infinito, para ti y para todas sus creaciones. No tiene límites ni restricciones. No hay en el jueces, ni jurados ni culpables, sólo amor, comprensión y entendimiento. Todas sus creaciones desean aprender y experimentar los distintos aspectos de la vida, en este y otros espacios, en este y otros planetas y universos.

La vida es eso, es experiencias, es prueba y error. Es aprendizaje, más o menos dolorosos, más o menos duros, pero todos te conducen al mismo entendimiento, que todo es uno, que todos los caminos te conducen al entendimiento de que somos un gran grupo de seres cuyo origen es el mismo: el Padre, nuestro creador; que salimos de su lado para evolucionar a través del aprendizaje, de la experimentación y , en este proceso, evolucionamos todos y entendemos nuestro origen y, luego de tantas vueltas, sólo deseamos regresar a El, al Padre, a contarle nuestras experiencias, decirle lo que aprendimos y ya nos enganchamos nuevamente y regresamos otra vez, una y otra vez, a aprender otras cosas, más cosas, a seguir experimentando, en un proceso infinito.

Luego que nuestra alma entiende todos los conceptos sobre amor, lealtad, justicia, las leyes universales, el funcionamiento del planeta y del universo, el respeto por la Madre Tierra y la naturaleza toda, ya está en condiciones de elevarse a planos superiores de sabiduría y comprensión. Es por esto, la desesperada necesidad que tenemos todos los seres de venir, una y otra vez, sin importar cuánto nos golpeemos; es por conseguir, por lograr ascender a ese plano superior de conciencia que nos acerca al Padre un poco más, que nos permite ayudar a los que todavía están en la rueda girando y entendiendo el funcionamiento de todas las cosas.

Es importante transmitir esto a aquellos que no lo entienden, que están desorientados, que no encuentran sentido a sus vidas porque ese es el sentido real de toda existencia: la evolución a través de la experimentación, del aprendizaje.

Cuando las almas entienden esto que parece tan simple pero que a la vez cuesta tanto, están ya en condiciones de ascender y servir, con amor y dedicación, desde otros planos, a las que todavía se encuentran en el entendimiento de este proceso.

Sí, cuanto más comprende cada ser a través de toda existencia, entiende que es a través del amor el proceso más fácil y el más firme, el más estable; a través del amor.

Cuando logramos, después de mucho regresar, entender el proceso y la necesidad de realizarlo a través del amor, nuestro gozo es infinito, nuestra sensación de plenitud también, y la alegría es el estado permanente. Entiendes ahora? Buscamos y experimentamos siempre, de toda forma, porque nuestro espíritu conoce el premio. Por eso no hay cansancio ni experiencia, por dura que sea, que nos impida seguir intentándolo; porque cada vez que evolucionamos y entendemos, estamos más cerca del Padre y Su Amor. Entiendes verdad? No es simple y maravilloso? No vale la pena todo ese esfuerzo? Finalmente, ¿tiene sentido verdad? el venir una y otra vez. ¿No es maravilloso? Es la búsqueda del Amor y la Felicidad con mayúsculas.

Te amamos. Hacia allí vas tú también. Sigue esforzándote pues el premio vale la pena, el esfuerzo. Bendita seas.